Millones de almas se salvarán gracias a estos mensajes

Mi amada hija, el Don del Espíritu Santo te fue otorgado hoy, junto con gracias Divinas especiales. Tú, hija Mía, habiendo entregado tu libre albedrío, pasarás ahora a hacer Mi Santísima Voluntad. Ahora te darás cuenta de la importancia de la completa obediencia a Mí, en tus pensamientos, palabras, actos, comportamiento y actitud. Ahora seguirás Mi guía y la buscarás antes de tomar cualquier acción en Mi nombre.

Finalmente, estás listo para seguir Mis instrucciones. Ahora necesitas dedicarme al menos dos horas en oración cada dos días. Además, debes seguir las instrucciones del santísimo director espiritual enviado a ti desde el Cielo. Él te hablará como Yo se lo ordene. Haz exactamente lo que te diga. Debes procurar comunicarte conmigo todos los días, porque tengo mucho que decirte.

Hija Mía, escucha sólo Mi Voz de ahora en adelante. Escribe sólo lo que recibas de Mí. Nunca tomes de otros significados sobre estos Santísimos Mensajes. Sólo hay una boca con la que Me comunico contigo y es la Mía. Confía en Mí, hija Mía. Confía en Mí completamente. Nunca cuestiones estos Mensajes, porque soy Yo quien habla contigo. Recuérdalo siempre. Ahora que confías en Mí, serás mucho más fuerte. Déjame asegurarte que ahora serás capaz de lidiar más efectivamente con los ataques del engañador.

Siéntete en paz. El Amor por ti, hija Mía, está surgiendo a través de Mi Corazón, mientras tu devoción y amor por Mí te llena y te hace débil. Este poderoso Amor es puro en su totalidad y no puede ser comparado con nada que hayas experimentado antes en este mundo.

El cielo se regocija por tu rendición final. Pero ahora tendrás que prepararte para ayudar a salvar millones de almas. Hija Mía, la tarea que te pido es enorme en términos humanos. Tú, hija Mía, serás la mensajera al mundo del mayor volumen de Mi Santa Palabra, para que el mundo se prepare para Mi Segunda Venida.

Ellos, Mis preciosos hijos a quienes amo con una profunda pasión más allá de tu conocimiento, deben ser atraídos de vuelta a Mi Sacratísimo Corazón antes de que sea demasiado tarde. Tú, hija Mía, deberás entregar Mi Palabra a la humanidad. No es tarea fácil. Sufrirás por ello, pero debes comprender que este es ahora tu deber para Conmigo. Estás llamada a asegurar, que a través de la Palabra de Mis Labios Divinos, que millones de almas serán salvadas de los fuegos del Infierno.

Comunícate conmigo correctamente ahora. Yo te guiaré en todo momento. La paz sea tuya, hija Mía. Mi Santísimo Espíritu está ahora inundando tu alma. Ahora estás llena de amor y alegría y lista para la siguiente etapa de esta Misión Divina.

Tu Salvador
Jesucristo